06 de Agosto de 2019. 8:24 pm.
Los Rayados del Monterrey ascendieron por segunda ocasión a la Primera División en 1960 y desde entonces han permanecido en el máximo circuito.
Las primeras dos temporadas fueron difíciles y el equipo sufrió para evitar el descenso. Sin embargo, a partir de la temporada 1962-63 los Rayados se volvieron un equipo protagonista de la mano del técnico uruguayo Roberto Scarone.
Una de las aduanas más difíciles de aquella época era la de Morelia: un equipo sin mucho presupuesto, pero bravo y aguerrido.
En sus primeras cinco visitas a Morelia, "La Pandilla" no había logrado ningún triunfo.
La primera vez que se enfrentaron en Primera División y en territorio michoacano fue el 1 de enero de 1961, y el marcador terminó empatado a cero.
Tres meses después, Rayados regresó a Morelia para disputar el torneo de Copa y se llevó una derrota por 1-0.
En la temporada 1961-62, el Monterrey cayó 2-1 en su visita a los entonces llamados “Canarios” del Morelia, el 24 de diciembre de 1961.
Para la temporada 1962-63, la directiva Rayada comenzó a armar mejor al equipo y los resultados positivos empezaron a llegar.
En esa temporada, el equipo regiomontano visitó a Morelia el 16 de septiembre de 1962 y empató a dos goles.
Para la temporada siguiente, Rayados vivió su mejor temporada en su historia hasta ese momento. Se quedó muy cerca del título. En esa temporada (1963-64), "La Pandilla" ligó ocho victorias de forma consecutiva, un récord del club que permanece hasta la fecha.
Claudio Lostaunau, segundo de izquierda a derecha en la segunda fila, parte fundamental del plantel Rayado que consiguió el Tercer Lugar en la Temporada 1964-65.
Así, con esa seguidilla de triunfos, el Monterrey de Roberto Scarone viajó a Morelia para extender su racha y seguir aspirando a ser campeón.
Lamentablemente, en la difícil cancha del Morelia, el cuadro albiazul vio rota su racha al perder 2-0. La derrota fue muy dolorosa porque el cuadro albiazul se rezagó en su lucha por el título y ya no logró recuperarse.
La revancha para el Monterrey llegó en la temporada 1964-65. En ese entonces, el Morelia continuaba jugando sus partidos de local en el pequeño campo “Independiente”, un estadio prácticamente amateur, propiedad del dueño del equipo.
La cancha tenía dimensiones muy pequeñas que provocaban el amontanamiento de los jugadores y dificultaba al visitante proponer su forma de juego.
Además, el pasto y la tierra estaban flojos y el público solía manifestar su hostilidad a los cuadros visitantes. Pocos equipos lograban salir airosos de esa difícil aduana.
El domingo 26 de julio de 1964, Rayados enfrentó al Morelia en su cancha en partido de la jornada 8.
Dada la historia negativa del Monterrey en esa plaza, la prensa michoacana alardeó desde días antes que su equipo obtendría un triunfo fácil.
Esta vez no fue así: Scarone planteó un partido muy inteligente y los Rayados salieron a proponer desde el primer minuto, y al 21 abrieron el marcador.
Guillermo Vázquez desbordó por la izquierda y sacó un centro al área que fue rematado por el brasileño Olinto Rubini.
En el inicio de la parte complementaria, el cuadro local empató a los 46’ gracias a un remate de pierna izquierda de Antonio “Manquito” Villalón.
Con el gol, el Morelia tomó confianza y se lanzó al frente.
El partido se tornó en una batalla pareja hasta que al minuto 73 apareció la genialidad del peruano Claudio Lostaunau, quien, tras recibir un pase de Rubini, amagó a un defensor y, desde la entrada del área, soltó un disparo potente de derecha para batir al arquero del Morelia y poner a los Rayados arriba en el marcador.
El Monterrey guardó el resultado y el árbitro Vicente Medina pitó el final del partido.
Ese gol de Lostaunau acabó con la racha negativa de Rayados en la cancha de Morelia y le dio a La Pandilla su primer triunfo en esa complicada plaza.
CONOCE A CLAUDIO LOSTAUNAU
Claudio Lostaunau llegó al Monterrey como uno de los refuerzos estelares del equipo para su nueva incursión en el máximo circuito en 1960-61. A pesar de haber llegado muy joven, el peruano rápidamente mostró su gran talento.
Hombre de pocos, pero decisivos goles, Lostaunau destacó más como armador y pasador. Su calidad y talento eran indiscutibles.
Durante la primera mitad de los años sesenta, fue el referente y máxima figura de los Rayados.
Con su clase, llevó al Monterrey a ser un equipo protagonista y un serio aspirante al título entre 1962 y 1965.
A pesar del paso del tiempo, se le sigue considerando uno de los mejores extranjeros que han jugado en nuestro país.
Su futbol fuera de serie contribuyó a que la Afición por el futbol en Monterrey creciera y se consolidara.
La cancha del Estadio Tecnológico fue testigo de innumerables jugadas magistrales del talentoso mediocampista peruano.
¡Gracias, don Claudio Lostaunau, por ser parte de la Historia Rayada!
Alberto Barrera-Enderle